En una noche mágica para el equipo blanco, el Real Madrid se coronó campeón de la Supercopa de la UEFA al vencer 2-0 al Atalanta en el Estadio Nacional de Varsovia, Polonia. Kylian Mbappé, en su primer partido oficial con el conjunto merengue, fue pieza clave en la victoria anotando su primer gol con el equipo y sumando su primer título en apenas su debut.
Desde el inicio del partido, los dirigidos por Carlo Ancelotti tomaron el control del balón y dominaron a un Atalanta que no pudo contener el ataque madrileño. Aunque la primera mitad terminó sin goles, el Real Madrid impuso su ritmo, con Vinicius Jr siendo el jugador más desequilibrante por la banda.
En la segunda mitad, el marcador finalmente se abrió gracias a una genialidad de Vinicius Jr, quien con un amague dejó atrás a tres defensores dentro del área y asistió a Fede Valverde. El uruguayo no desaprovechó la oportunidad y empujó el balón al fondo de la red para poner el 1-0 a favor de los merengues.
Minutos después, Jude Bellingham encontró un espacio perfecto para habilitar a Kylian Mbappé, quien no falló en su definición y mandó el balón al fondo de las redes con un potente disparo que el portero de Atalanta no pudo detener. Con este gol, el francés debutó de manera inmejorable y dejó claro que será una pieza fundamental para el equipo en esta temporada.
El Atalanta intentó reaccionar, pero el equipo italiano se descompuso, apostando por balones largos que no generaron peligro real. El Real Madrid mantuvo su ventaja y aseguró su quinto título de Supercopa de la UEFA, reafirmando su supremacía en Europa.
Con este triunfo, el equipo merengue comienza la temporada con el pie derecho y con Mbappé ya celebrando su primer trofeo en su nueva casa.
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